martes, enero 04, 2005

amnistia internacional

http://www.es.amnesty.org/sobreai/objetivos.shtm

Sobre AmnistΓ­a Internacional



QuΓ© es AI
Objetivos
Hechos y cifras
Medios de acciΓ³n
Imparcialidad e independencia
Ofertas laborales
Nguyen Chi Thien, un poeta vietnamita, ha pasado mΓ΅s de 30 aΓ±os, la mitad de su vida, en prisiΓ³n por su poesΓ­a Β«subversivaΒ».
Método de tortura conocido como «shabeh»© David Gerstein / B'Tselem


Los objetivos de AmnistΓ­a Internacional
AmnistΓ­a Internacional tiene un mandato limitado. No es posible enfrentarse con eficacia a todos los problemas del mundo (el hambre, la degradaciΓ³n del medio ambiente, la amenaza nuclear...). Cada organizaciΓ³n debe concentrar en una labor especializada sus escasos recursos. Hasta el momento, puede describirse asΓ­ el campo de intervenciΓ³n de AmnistΓ­a como sigue.
LiberaciΓ³n de presos y presas de conciencia
No han matado a nadie. No han preconizado la violencia. Sin embargo, estΓ΅n en la cΓ΅rcel, a menudo durante largos aΓ±os. Su delito: haber expresado ideas polΓ­ticas o religiosas que no son del agrado del poder establecido, pertenecer a un grupo Γ©tnico perseguido, hablar una lengua mal vista por las autoridades, ser de otro color...AmnistΓ­a lucha para que estos hombres y mujeres no se conviertan en presos olvidados, y exige su liberaciΓ³n inmediata e incondicional.
Exigencia de juicios justos para los presos polΓ­ticos
Para todos los presos polΓ­ticos, y aquΓ­ no cabe discriminar a los que han recurrido a la violencia, AmnistΓ­a reclama que sean juzgados, y eventualmente condenados, con un escrupuloso respeto de las normas internacionales. Los detenidos deben ser inculpados formalmente, deben poder escoger libremente un abogado y ser procesados por un juez independiente en un plazo razonable. No deben ser torturados para hacerles confesar no importa quΓ© cosa. Su juicio, en definitiva, no debe ser un simulacro. Si han de ser condenados por haber cometido un delito internacionalmente reconocido, deben serlo conforme a las reglas que garantizan la seguridad jurΓ­dica de las personas.
Lucha contra la tortura
Los Estados condenan unΓ΅nimemente la tortura. Sin embargo, Γ©sta se practica aΓΊn en uno de cada tres paΓ­ses. Palizas, descargas elΓ©ctricas, agresiones sexuales... Todos los mΓ©todos son buenos para arrancar una Β«confesiΓ³nΒ» y aterrorizar a los que estΓ΅n en libertad. En Honduras se utiliza habitualmente la Β«capuchaΒ». Se trata de un capirote de caucho, a veces impregnado de cal, que provoca casi la asfixia. En TΓΊnez, las vΓ­ctimas son suspendidas cabeza abajo, con las muΓ±ecas y los pies atados a una barra de hierro, segΓΊn la tΓ©cnica conocida como el Β«pollo asadoΒ». AmnistΓ­a Internacional lucha contra el secreto y el aislamiento que rodea estas prΓ΅cticas y promueve la aplicaciΓ³n de la ConvenciΓ³n contra la Tortura.
Denuncia de las Β«desaparicionesΒ» y los asesinatos polΓ­ticos
Existe un buen medio de deshacerse de las personas molestas para un gobierno sin tener que dar muchas explicaciones: hacerlos "desaparecer". En el silencio de la noche o del alba, se embarca a un individuo en un coche sin matrΓ­cula con rumbo desconocido. Visto y no visto. Decenas de miles de personas han sido secuestradas, y a menudo asesinadas en secreto, sin que se pueda hallar ninguna traza de su arresto.Variante del mismo principio: no hace falta capturarle. Se le mata allΓ­ mismo. Una, dos personas, un pueblo entero. Es lo que tΓ©cnicamente se conoce como ejecuciones extrajudiciales.AmnistΓ­a lucha contra estas siniestras prΓ΅cticas haciendo pΓΊblicos estos crΓ­menes, rompiendo el silencio que los rodea, reclamando que se investiguen oficialmente para conducir a sus responsables ante la justicia. Se dedica asΓ­ mismo a buscar a los "desaparecidos". En 1990, por ejemplo, un equipo de investigaciΓ³n encontrΓ³ en una base militar de Filipinas a dos personas que el gobierno negaba haber detenido.
OposiciΓ³n a la pena de muerte
AmnistΓ­a trabaja en pro de la aboliciΓ³n de la pena de muerte porque viola el derecho mΓ΅s primario de una persona: el derecho a la vida. AdemΓ΅s, nunca ha sido probado que proteja a la sociedad. Los delitos de sangre no disminuyen en los paΓ­ses que la practican y no aumentan en los que la han abolido. Y es un castigo irreversible, ni el mejor sistema judicial escapa a la posibilidad del error humano o al prejuicio. No se puede devolver la vida a un inocente ejecutado, como tantas veces ha sucedido.Por otra parte, el argumento segΓΊn el cual algunos crΓ­menes son tan abominables que sus autores no merecen sino la muerte va contra los fundamentos mismos de los derechos humanos. Este argumento podrΓ­a emplearse igualmente para justificar la tortura o el encarcelamiento sin juicio.AmnistΓ­a organiza grandes campaΓ±as a fin de convencer a la opiniΓ³n pΓΊblica de la crueldad e ineficacia de la pena capital.Actualmente, cerca de un centenar de Estados la contemplan. En los ΓΊltimos diez aΓ±os, mΓ΅s de 40.000 hombres, mujeres y niΓ±os han sido ejecutados en el mundo. Afortunadamente, el movimiento en favor de su aboliciΓ³n se ha ido extendiendo y cada vez son mΓ΅s Estados los que la han suprimido.
Condena de los abusos cometidos por grupos de oposiciΓ³n
El secuestro, la tortura y el asesinato no son sΓ³lo obra de los gobiernos. TambiΓ©n grupos armados de oposiciΓ³n cometen asesinatos y practican secuestros, que a menudo conllevan el maltrato y la ejecuciΓ³n de sus prisioneros. AmnistΓ­a no toma posiciΓ³n alguna sobre la legitimidad del uso de la violencia, pero condena sin paliativos este tipo de abusos que transgreden el derecho internacional humanitario, haciΓ©ndolo constar en sus informes y actuando cuando las circunstancias lo permiten.